sábado, 24 de marzo de 2012

Una caída inesperada!

Todo comenzó un día particular, el cual yo estaba en la casa de mi abuelo en su tercer piso. Estaba jugando con mi hermana, cuando de repente ella me dice: Claudia por favor podrías bajar a traerme el teléfono, yo como siempre y tontamente la obedecí. Al obeder a mi hermana, yo tenía que ir hasta al primer piso. Y para ese entonces, creo yo no era tan coordinada que digamos, el bajar las escaleras brincando de escalón en escalón y para colmo distraída no sería lo correcto para una niña pequeña de ocho años de edad, ya que las escaleras de la casa de mi abuelo eran un poco empinadas o eso me parecía a mí.
Cuando mi hermana quiere llamar mi atención, me grita muy fuerte para decirme que me apurara, que hizo que mi mirada se dirigiera hacia arriba. Y fue entonces cuando perdí el equilibrio y me caí contra el lavadero, que estaba al lado derecho de la escalera.
Todo mi peso se fue hacia mi pequeña oreja, la cual tuvo una diminuta abertura que hizo que sangrara demasiado y manchara mi pequeño polo para entonces. Mi hermana me ve subir toda desconcertada y se preocupa y me dice: ¿Claudia que tienes? Al ver que estoy sangrando y al no responder a su pregunta, corre desesperada gritando ¡mamá, mamá, mamá, ha Claudia le está sangrando la oreja! De inmediato mi mamá sube y me lleva al hospital más cercano, donde le dicen que me tienen que coser la pequeña abertura de mi oreja.
El médico cirujano disponible para el momento le dice: que me tendrá que realizar unos tres pequeños puntos, los cuales harán que mi oreja cierre la diminuta abertura y cicatrizara más rápido. Al empezar el cirujano con la operación lo único que llego a recordar es que mi mama estuvo a mi lado en todo momento y que cosieron la herida rápido. Pasaron los días y tuve que volver a ir donde el cirujano porque me habían citado, cierto día para que él mismo me pudiera quitar los puntos.
Ya al pasar el tiempo de esa pequeña caída que tuve, todo volvió a ser casi igual en mi organismo, pero con tan solo una diferencia que perdí un poco de sensibilidad en mi oreja derecha.

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